Parecía que se nos haría eterno cuando nos despedimos de él con la crónica del concierto en el ahora Wizink Center. Pero volvió pronto, y como ya dijo, vino lo mejor. Ante lo nuevo os digo: armonía. Esa es la primera palabra que puedo expresar para describir el nuevo disco de Andrés Suárez, Desde una ventana.
El pasado 26 de mayo salió y se lanzó en plataformas digitales, y confieso que no he dejado de escucharlo desde entonces. A pesar de que el single me pareció que dejaba bastante que desear, solo es una prueba más de que para juzgar algo debes disfrutar de la obra completa.
El disco está compuesto por 15 canciones, donde podemos escuchar una gran variedad de ritmos e instrumentos, y no, no son todas las canciones lentas, y esto es gracias a la banda que le acompaña detrás. En cuanto a las letras, qué esperar de alguien que hace poesía con guitarra y voz. Un conjunto cargado de dolor transformado en arte, nada nuevo en Andrés, con canciones que hablan del amor con todas sus letras, como es el caso de El corazón me arde o La próxima vez en Lisboa. Pero sin duda, para mí, la canción más triste es Estrellas. Y os animo a juzgar por vosotros mismos.
Andrés ha decidido recuperar canciones como Ahora ya fue, 6+4, Ahí va la niña y Tal vez te acuerdes de mí. Variando acordes y letras consigue hacer evolucionar canciones que los más veteranos nos aprendimos gracias a unos vídeos subidos a YouTube, donde casi costaba entender las letras. También cuenta con la colaboración de Rozalén en la canción de Desamiga. Una combinación de voces y violín que pone los sentimientos a flor de piel.
Una recopilación de cincuenta y dos minutos de música y voz que habla de pasado, que duele y lanza un grito de esperanza al mundo. Una nueva versión de Andrés que suena distinta pero a lo de siempre. Otra frescura instrumental y la misma poesía.
Actualmente, Andrés Suárez se encuentra firmando discos por España, aquí os dejamos las fechas:
Firmas de las que no puede irse sin cantar para todos, incluso para aquellos que se quedan fuera por completar el aforo. Cómo no, el gallego no deja a nadie indiferente. Estamos impacientes por ver y disfrutar de este disco en directo. De nuevo, Andrés, has vuelto a hacerlo.
