La más bonita causalidad
Y no casualidad.
O sí.
No sé.
Es que yo nunca creí en las casualidades.Pero sí en personas que son la causa, y después el efecto.
Personas con las que chocas, y no puede doler más bonito.
Y es que siempre somos unos novatos en abrir heridas por no saber después cómo cerrarlas.
No sé, siempre pensé que el chocar con alguien en ese aquí y ahora nunca es casualidad.
Todos somos el aquí y ahora de alguien.
Y
afortunadamente,
o ,
desafortunadamente,
ese aquí y ahora ya está escrito.