Si pudiera te besaba hasta la risa. Te arrancaba los defectos a mordiscos. Llevo tu nombre tatuado en el corazón y te juro que no hay mayor locura que esa. Pero qué es amar sin arriesgar. Sin desgarrarse el alma y volverse locos. Sin las manos frías y las quejas por el orden. La música a todo volumen en el coche. La carretera llena y nosotros desnudándonos. Con la mirada. Con las ganas de más. Y de menos. De más días y menos gilipolleces. Las prisas por casarnos, jurarte amor eterno. Que ya soy tuyo y tú mía. Lo sé. Esas cosas jamás se olvidan. Como tus caricias. Tu sonrisa a la luz de la luna. Y del sol. No me jodas, que da igual la luz. Esa ya la llevas tú. Con tus tacones y tus falsas esperanzas a los tontos que se creen que yo no estoy. Pero sí. Siempre. No me sueltes que me caigo y nunca aprendí a levantarme. Para qué. Follemos en el suelo pues.
Te quiero. Al oído. Despacio y en Roma. Que estoy hasta la polla de París. La ciudad del amor dicen. Si donde más hemos follado es en Nueva York. ¿Te acuerdas? Joder. Como para no. La ciudad de la luz, también. Pero esa es cualquiera en la que tú estés, mi amor.
Firma Invitada
Tiffany T.